Calcula el coste de tus vehículos de tu flota según sus trayectos
El control de costes y la optimización del uso de todos los recursos de tu empresa es una cuestión capital. Ello te permite tener toda la información para tomar las decisiones que más beneficien a tu actividad. Así aprovecharás mejor tu tiempo, y también el dinero de tu empresa. Pero, ¿sabes cómo llevar el control de una flota de vehículos? ¿Cuánto cuesta cada trayecto de cada uno de ellos? Te contamos cómo hacer la mejor gestión de la flota de vehículos de empresa y qué control deberías llevar a cabo.
Controla todos los costes de tu flota y optimiza su funcionamiento
La gestión de flotas de empresa es una parte importantísima para poder realizar el trabajo con la máxima eficiencia posible. ¿Qué debes hacer para llevar el control de una flota de vehículos de la manera más óptima? Tener en tu mano el control de combustible para flotas, por ejemplo, es un buen comienzo. Pero existen unos cuantos trucos infalibles para llevar a cabo esta tarea de una forma impecable. De esta manera será mucho más fácil que controles todos los parámetros para tomar las mejores decisiones posibles.
Suele decirse que la información es poder, y así es. El análisis de todos los datos necesarios para llevar el control de una flota de vehículos de empresa es muy importante. A pesar de que a priori pueda parecerte tedioso o que estás invirtiendo más tiempo del necesario, no escatimes esfuerzos. No dejes que los resultados a corto plazo te nublen la mente, pues el retorno de estas acciones se ve con el tiempo. Pero llega, y cuando lo haga será un factor diferencial frente a tu competencia.
Consejos para llevar el control de la flota de vehículos de empresa
Disponer de ventajas competitivas en relación a empresas del mismo sector es un valor añadido. Pero para tomar la delantera debes tener un buen control de la flota de empresa que te permita invertir tu tiempo de la mejor manera. Asimismo, debes saber que al coste total de la propiedad de tu flota de vehículos de empresa se le conoce como TCO. A continuación, te damos algunos consejos muy útiles en este sentido.
- Coste: el coste de los propios vehículos es el primer punto a tener en cuenta. Debes tener el control de cuánto pagas por disponer de tu flota de empresa mensualmente, y así saber cuáles son estos gastos. El coste de los coches, el mantenimiento, los vehículos de sustitución, la ITV o costes ocultos se pueden calcular y son importantes. Lo bueno es que al ser una flota de renting, todos los costes asociados están incluidos, como el mantenimiento. Cabe la posibilidad de que, llegado a un punto, te interese invertir en más vehículos. O incluso prescindir de alguno de la flota. Quizá, analizando los datos, descubras que hay alguno infrautilizado o sobreutilizado, incurriendo así en gastos extra.
- Combustible y kilometraje: los vehículos de tu flota de empresa tienen que moverse. Y por ello conviene atender al gasto en combustible. Ahora bien, si también tienes una flota de modelos eléctricos o híbridos enchufables, deberás calcular los costes asociados a los mismos. Y no solo en electricidad, sino también en la instalación de los puntos de recarga para ellos. Además, para saber cuánto se gasta tu empresa en este aspecto necesitas tener en cuenta el kilometraje que recorre cada vehículo.
- Desembolso extra: no olvides que existen otros desembolsos extra que juegan un papel importante a la hora de calcular el coste de flota de vehículos de empresa. Algunos de los más habituales son, por ejemplo, los peajes. Por ello conviene que tengas en cuenta qué rutas van a realizar los vehículos de tu flota. Además, también debes contar con los aparcamientos y con las multas. Y como la apariencia es muy importante, igualmente será necesario lavarlos de vez en cuando.
Conclusión
Las acciones con resultados a largo plazo son diferenciales, y las que en muchas ocasiones hacen sobrevivir a una empresa frente a su competencia. Llevar un buen control de la flota de vehículos es el perfecto ejemplo, así como los gastos asociados a la misma o el uso que se le da. Mantenimientos, costes ocultos, ITV, vehículos de sustitución… Sabiendo cuál es la mejor manera de optimizarla obtendrás una mayor productividad en relación no solo a la mencionada competencia, sino a tu propia empresa en el pasado. Llevar a cabo estos consejos que te hemos dado es un gran paso para optimizar tu tiempo, tu esfuerzo y tu dinero. Y ese es uno de los mejores caminos hacia el éxito.