Equipamiento adicional del vehículo: ¿Qué deberían tener en cuenta los gestores de flota?
Una vez escogido un vehículo, surge la siguiente pregunta: ¿Qué equipamiento adicional escoger? En este artículo, pondremos el foco sobre los imprescindibles del equipamiento y descubriremos cuáles son los factores que marcan la diferencia. Además, echaremos un vistazo a las implicaciones fiscales, las diferencias regionales y el impacto sobre el Coste Total de Propiedad (CTP).
Comencemos por lo básico. Al hablar de equipamiento, podemos diferenciar entre el equipamiento opcional y los accesorios. El equipamiento opcional se instala en fábrica, mientras que los accesorios suelen añadirse tras la inscripción del vehículo.
El equipamiento opcional frente a los accesorios
El equipamiento opcional puede tener un impacto impositivo, ya que está sujeto tanto al IVA como a posibles impuestos al lujo, o considerarse prestaciones en especie para el conductor. En ocasiones (como es el caso en Países Bajos), los accesorios están exentos de impuestos al lujo y a prestaciones en especie, por lo que puede resultar interesante instalar cuanto más equipamiento mejor después de la inscripción del vehículo. Esto puede tener un alcance más amplio de lo que uno pensaría inicialmente: «Accesorio» no se refiere únicamente al típico enganche para remolque, sino que también se pueden considerar «accesorios» extras como la instalación de lunas tintadas, sensores de estacionamiento o asientos de cuero que, tras la inscripción del vehículo, pasarán a considerarse accesorios.
El número de opciones está aumentando
Los consumidores tienen cada vez más opciones de equipamiento adicional para elegir. Análisis externos realizados en Alemania sugieren que el número de posibles combinaciones a la hora de configurar nuestro vehículo ha crecido un 11 % anual durante los últimos 20 años, prácticamente. Esto se debe en cierta medida a la irrupción en el mercado de nuevos modelos, pero este aumento, principalmente, puede atribuirse a las nuevas funciones y niveles de equipamiento , así como a las estrategias implementadas por los fabricantes en torno a la oferta de paquetes de opciones.
La escasez de semiconductores actual es un desafío cada vez mayor, a la luz del creciente número de funciones disponibles y niveles de equipamiento que los consumidores tienen a su alcance. Las opciones de equipamiento a menudo precisan del uso de semiconductores (ya sea en techos solares, asientos eléctricos, asistentes de carril, etc.). Además, los fabricantes aplican estrategias, según las cuales optar por un paquete de equipamiento u otro puede requerir la adición de otras opciones, lo que aumenta a su vez la cantidad necesaria de semiconductores. En el mismo sentido, conviene observar que cuanto más específico y exhaustivo sea su pedido, más probabilidad hay de retrasos en la entrega del vehículo.
Las características generalmente se despliegan desde los vehículos más grandes o más premium hasta los segmentos más pequeños. Mientras que los airbag y ABS eran una rareza cuando aparecieron por primera vez, hoy en día no pueden faltar en ningún automóvil. Lo mismo puede decirse de los sistemas de navegación, aunque los análisis externos están mostrando novedades interesantes en este sentido. La oferta de sistemas de navegación en los segmentos A y B parece haber alcanzado su punto más alto en un 50 %, siendo superada por la integración de teléfonos inteligentes, que ahora se ofrece en casi el 70 % de las configuraciones.
Diferentes preferencias de equipamiento entre regiones
No hace falta ser científico para entender que los asientos calefactados son menos necesarios en el sur de Europa que en los países nórdicos. Según estudios externos , los países del centro y norte de Europa prefieren vehículos mejor equipados mientras que, en los países del sur y este, los consumidores se muestran más sensibles a los precios. Hay que decir que debido a esta sensibilidad a los precios en el sur de Europa, los vehículos de segunda mano bien equipados se venderán claramente más rápido, ya que hay menos en oferta.
Gracias a sus análisis propios, LeasePlan conoce bien las diferencias entre países. En las doce regiones incluidas en el análisis (Austria, Bélgica, República Checa, Francia, Alemania, Italia, Países Bajos, Polonia, Rumanía, España, Suiza, Reino Unido), el porcentaje medio de equipamiento opcional incluido en el precio neto de catálogo es de alrededor del 10 %. Dado que el precio medio neto de catálogo ronda los 35.000 €, esto implica que a la inversión requerida se le añaden 3.500 € adicionales.
Países como Alemania, Austria y Suiza obtienen puntuaciones iguales o superiores al promedio.
Sjoerd Brenters, director de servicios de consultoría internacional de LeasePlan, reflexiona sobre este punto:
El equipamiento adicional y su impacto en el CTP
LeasePlan observa que son muchos los ejemplos en los que el porcentaje del equipamiento adicional sobre el precio de catálogo neto está en los dos dígitos. Por ejemplo, el Mercedes Clase S (106.000 €), con 39.000 € adicionales en equipamiento. Pero también el más accesible Volkswagen Passat, por 38.000 € (más 26.000 € en extras).
El equipamiento adicional juega en liga a propia a la hora de determinar el valor residual. Algunos extras pueden suponer una inversión adicional pero mantener el CTP relativamente estable. Aunque esto no es muy común, se puede pensar en, por ejemplo, la pintura metalizada, ya que se protege mejor la pintura y los vehículos con pintura metalizada son más demandados, algo que mejora su valor residual.
La mayoría de las veces, el equipamiento adicional elevará el CTP. Y no hay una forma única de comprender su impacto sobre el CTP mensual. Por supuesto, dependerá del tipo de extra (por ejemplo, un techo solar frente a ruedas más grandes). Pero existen variables como la marca, el modelo y el país que también afectarán el valor residual de ese equipamiento opcional en concreto.
Implicaciones para los gestores de flota
Desde la perspectiva de los gestores de flota, el tema del equipamiento adicional está estrechamente relacionado con la política de vehículos de la empresa y el presupuesto que se maneje en la partida de alquiler de vehículos. Hay dos aspectos específicos que deberían incluirse en la política de vehículos:
- 1.Una matriz de vehículos que incluya los presupuestos máximos
- 2.Un límite explícito para la negociación de mejoras
La matriz de vehículos es una descripción general que identifica a qué vehículos pueden optarse desde cada categoría laboral, así como cuál es el presupuesto máximo que lo acompaña. Un ejemplo sería el caso de un director comercial en Alemania, con un presupuesto máximo de 750 € mensuales. El límite para la negociación de mejoras se puede expresar en porcentajes máximo del presupuesto mensual o bien en una cantidad máxima fija. O, como ya mencionamos, sin límites, pero esto no se recomienda.
En resumen
- Los consumidores tienen cada vez más opciones de equipamiento adicional para elegir. Esto se debe en parte a la llegada al mercado de nuevos modelos, pero principalmente a las nuevas características, así como a las estrategias de paquetes opcionales y de líneas de corte implementadas por los fabricantes.
- Como los distintos extras precisan de semiconductores, la escasez actual de chips supone un desafío cada vez mayor a la luz del creciente número de funciones disponibles y niveles de equipamiento que los consumidores tienen a su alcance. Cuanto más específico y exhaustivo sea su pedido en términos de equipamiento, más probabilidad hay de que la entrega del vehículo se retrase más.
- El equipamiento adicional juega en liga a propia a la hora de determinar el valor residual. Algunos extras pueden suponer una inversión adicional pero mantener el CTP relativamente estable. La mayoría de las veces, el equipamiento adicional elevará el CTP.