Errores que deben evitarse en la gestión de flotas

El aprovechamiento del tiempo y de los recursos en una empresa es una cuestión de suma importancia. Hay ocasiones en las que la línea que separa el éxito del fracaso es muy fina, y existen aspectos que no deben pasar desapercibidos. Uno de ellos es la gestión de flotas de vehículos. Una tarea que conviene optimizar al máximo de cara a poner el foco en otras más relevantes en el devenir de una compañía.

Las diferentes técnicas e informaciones acerca de cómo gestionar la flota de vehículos de una empresa y de establecer una estrategia son muy variadas. Sin embargo, al final eres tú quien decide cómo hacerlo. Por eso, a continuación, te contamos cuáles son los principales errores al respecto. De esta forma podrás prevenir antes que curar, y sacarle todo el partido necesario tanto al tiempo como a los recursos:

• Vehículos: la elección de los vehículos adecuados es muy necesaria. Suele pasar que no siempre se escogen los más idóneos para la actividad que realiza tu empresa. A la hora de elegirlos hay que tener en cuenta las medidas o el peso de los objetos a transportar, así como el recorrido. Pero no conviene saber solo el modelo o el tipo de vehículo, sino también su motorización. Saber si tu flota de vehículos va a recorrer grandes distancias o a circular mayoritariamente por ciudad es relevante. No elegir la mejor alternativa para cada uso es una fuente de problemas.

• Mantenimiento y uso: lo mismo ocurre con el mantenimiento. No hacer un seguimiento exhaustivo en la gestión de flotas puede derivar en averías; o al menos, maximizarlas en cierto grado. El hecho de no llevar un mantenimiento preventivo puede costarte tiempo y dinero. Y al hilo del punto anterior, no escoger los vehículos que realmente necesitas puede incurrir en desgastes innecesarios e, igualmente, el paso por el taller.

• Conductores: los conductores son un elemento muy importante y no conviene descuidarlos. Hacerlo es descuidar a los principales responsables del buen uso de la flota, y de que la utilización de los vehículos sea la adecuada. Y no solo eso, sino que también juegan un papel clave a la hora de controlar el gasto de combustible, o de electricidad. No tomar el tiempo necesario en formar o mejorar los hábitos de conducción de tus conductores, puede desembocar no solo en mayores costes, sino lo que es peor, en mayor índice de accidentes.

• Datos: los datos son la herramienta necesaria para hacer un análisis correcto. En muchas ocasiones ocurre que se subestiman, y que no se utilizan para mejorar, cuando la información que aportan es realmente valiosa. Sirven para, por ejemplo, observar los tiempos de transporte y entrega, descubrir cómo conducir de forma más eficiente o hacer un seguimiento de los vehículos en tiempo real.

• Planificación: precisamente conviene echar mano de esos datos para después realizar una buena planificación logística. En caso de no hacerlo podrías perder tiempo y dinero en todo lo relativo a la gestión de tu flota de vehículos.

En el mundo de la empresa, la optimización del tiempo y de los recursos es clave. Por eso la gestión de flotas de vehículos es tan importante. Evitando esta serie de errores comentados conseguirás centrarte en otras tareas incluso más relevantes, cumpliendo objetivos económicos y temporales. Errores que en un principio pueden no tenerse en cuenta, pero a los cuales no hay que perder de vista. La principal idea es cumplir con una optimización que te permita aprovechar al máximo todos los recursos de tu empresa.